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Descubre la conmovedora historia de Tess de los dUrberville de Thomas Hardy

ue trabaje para los d’Urberville

John Durbeyfield, residente de la aldea de Marlott y arrendatario de una modesta casa con tierras, es el orgulloso padre de siete hijos. Aunque su carácter ocioso y su tendencia al alcohol lo han definido por mucho tiempo, un día recibe la sorprendente noticia de que su apellido es, en realidad, una distorsión de d’Urberville, un linaje noble de origen normando con una larga historia desde los tiempos de Guillermo el Conquistador. Con esta inesperada e ilustre revelación, John y su esposa deciden enviar a su hija mayor, Tess, a trabajar para los d’Urberville.

Introducción a Tess of the d'Urbervilles de Thomas Hardy

Thomas Hardy es uno de los escritores más reconocidos de la literatura inglesa del siglo XIX. Dentro de su extensa obra destacan numerosas novelas como Tess of the d'Urbervilles, una de las más conocidas y aclamadas.

Tess of the d'Urbervilles es una novela trágica que narra la historia de Tess Durbeyfield, una joven campesina que descubre ser descendiente de la antigua e ilustre familia d'Urberville. Esto la lleva a tener que enfrentarse a los prejuicios sociales y a las desigualdades de la época victoriana en Inglaterra.

La novela destaca por su crítica a la hipocresía y la moralidad imperantes en la sociedad de la época, así como por su exploración de temas como el amor, la culpa, la fatalidad y la lucha por la redención.

Una de las fortalezas de Tess of the d'Urbervilles es el personaje de Tess, una mujer fuerte y compleja que debe enfrentarse a difíciles situaciones y decisiones en una época en la que las mujeres tenían pocas opciones y derechos. Su lucha por su libertad y su identidad hace que sea una protagonista inolvidable.

Tess of the d'Urbervilles es una obra que sigue siendo relevante y vigente en la actualidad, ya que aborda temas universales que aún nos afectan y nos hacen reflexionar.

La impactante historia de los d'Urberville

Los d'Urberville eran una familia noble que residía en una hermosa mansión en el campo. Eran conocidos por su riqueza y poder, pero también por su comportamiento arrogante y despiadado hacia los campesinos que trabajaban en sus tierras.

La historia de los d'Urberville da un giro impactante cuando descubren que su linaje noble es realmente falso. Descienden de una historia de mentiras y engaños, y su riqueza proviene de la explotación de los más vulnerables.

La verdad sobre los d'Urberville salió a la luz gracias a una valiente joven llamada Tess, descendiente de una familia campesina. Tess había sido empleada como sirvienta en la mansión de los d'Urberville y pronto se dio cuenta de la crueldad con la que trataban a sus empleados.

Determinada a hacer justicia, Tess investigó la historia de los d'Urberville y descubrió su vergonzoso secreto. Sin pensarlo dos veces, decidió revelar la verdad al resto del pueblo y exponer a los d'Urberville por lo que realmente eran.

A pesar de las amenazas y el ostracismo que enfrentó, Tess persistió en su misión de poner fin a la tiranía de los d'Urberville. Finalmente, su valentía tuvo éxito y la familia fue desterrada y olvidada por siempre.

La historia de los d'Urberville es un recordatorio de que un linaje noble no garantiza la verdadera nobleza de carácter. Y que la valentía y la determinación pueden hacer que se desmoronen incluso los más poderosos.

La vida de John Durbeyfield en Marlott

John Durbeyfield fue uno de los habitantes más reconocidos en el pequeño pueblo de Marlott. Desde muy joven, se ganó la reputación de ser un trabajador incansable y un hombre justo y honesto.

John nació en Marlott en el año de 1820 y creció en una familia humilde, dedicada principalmente a la agricultura. Su padre le enseñó desde muy pequeño el valor del trabajo duro y la importancia de ser una persona íntegra en la vida.

Gracias a su inteligencia y dedicación, John logró prosperar en su vida. A los 18 años se casó con su amada Mary, con quien formó una familia y un hogar lleno de amor y felicidad.

Pero la vida de John no siempre fue fácil. Tuvo que enfrentar grandes desafíos y obstáculos en su camino. Uno de los más difíciles fue la pérdida de su esposa y su hijo mayor en un trágico accidente de carro.

A pesar del dolor y la tristeza, John encontró en su fe y en el amor de sus hijos y vecinos la fuerza para seguir adelante. Con su ejemplo y liderazgo, logró sacar adelante a su familia y a su comunidad, convirtiéndose en un verdadero pilar para Marlott.

Hoy en día, John Durbeyfield es recordado como un hombre ejemplar, que supo enfrentar las adversidades con coraje y resiliencia. Su vida nos enseña que la verdadera grandeza se encuentra en las acciones del día a día y en el amor por los demás.

Que John Durbeyfield sea siempre un recordatorio de lo que se puede lograr cuando se lucha por lo que uno cree y se vive con integridad.

Los siete hijos de John Durbeyfield y su orgullo

John Durbeyfield, un humilde granjero de la campiña inglesa, era un hombre orgulloso de su descendencia. Con siete hijos a su cargo, John se enorgullecía de su gran familia y creía que eran el reflejo de su éxito en la vida.

Sin embargo, la realidad era muy distinta. Los siete hijos de John eran en realidad una carga para él. Con la tierra cada vez más pobre y las cosechas escasas, no había suficiente para alimentar a su familia numerosa. A pesar de ello, John se negaba a reconocer su verdadera situación y continuaba presumiendo de sus hijos ante sus vecinos y familiares.

José, el hijo mayor, era el único que aportaba algo de dinero al hogar gracias a su trabajo como aprendiz en un taller de carpintería. Los demás pasaban los días ociosos y John se negaba a ver la realidad: sus hijos no eran productivos ni estaban aportando nada a la familia.

La situación se volvió aún más complicada cuando John se enteró de que sus hijos habían heredado su orgullo y se negaban a trabajar en los campos como él lo hacía. Preferían gastar su tiempo en actividades poco productivas, convencidos de que eran demasiado importantes para realizar las tareas del campo.

Finalmente, la realidad golpeó a John de manera cruel. Con la muerte de su esposa y la falta de recursos, se vio obligado a mandar a sus hijos a trabajar como sirvientes en las casas de los ricos. John, que una vez había sido tan orgulloso de su gran familia, ahora se arrepentía de su arrogancia y su incapacidad para ver la verdadera situación en la que se encontraban.

La verdadera riqueza no se mide en número de hijos o en apariencias, sino en el amor y la unidad de una familia.

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